Algunos son partidarios que de los establecimientos naturistas privados pueden acoger aquellos que todavía no se decidieron por la desnudez. Los lugares públicos son por naturaleza de nudismo opcional ya que no se podrían imponer limitaciones en ellos, salvo que se configuren delitos contemplados por el derecho penal (atentados al pudor, exhibicionismo, etc).
Renata Freire, presidenta del NIP (Naturismo Interior Paulista-Brasil) manifiesta en una entrevista publicada por Jornal Olho NU que “ … No hay nada de malo tener una que otra persona que acompaña al marido y que todavía no tiene la certeza de si es o no naturista. Pero está claro que debe trabajarse con estas personas, acompañándolas y estimulándolas para que se desnuden. Tal vez el compañero no lo ha logrado, pero otras personas y el mismo entorno pueden ser más convincentes”.
“En los primeros momentos la gente que llega tiene que presentarte y mostrarse. Si en esta convivencia se constatase algún tipo de disturbio del comportamiento que no fuese naturista allí se podría conversar para que se retire. Las personas malintencionadas se van solas, porque no hay entorno para ellos. Algunas personas distorsionan su comportamiento porque bebieron de más y no saben cómo controlarse o porque ven la reunión como una novedad”
“Las personas son diferentes unas de las otras, y no tenemos por qué ponerles rótulos ni crucificarlas o juzgarlas Hay que hablar con ellas, pedirles respeto por los demás y que reconsideren su conducta Se trata de resolver las cosas de la manera más pacífica y armoniosa posible”
Pero tampoco en los lugares públicos las personas tienen que molestarse tanto con la mirada de los curiosos. No hace falta ser tan radical, por lo contrario esto puede aumentar el número de practicantes. No tenemos que luchar con ellos, sino tratando de trabajar esto armoniosamente “
“En cuanto a los contactos virtuales, (el primer paso para el naturismo de muchos), las personas leen los mensajes pero la mayoría no participa activamente sino solamente como curiosos. Los grupos virtuales sirven para pasar información”
Pero, como anticipamos, no todos están de acuerdo en esta política de apertura:
Mark Cornick, decididamente partidario del nudismo obligatorio opina que “Muchos de los lugares naturistas no exigen que se esté desnudo todo el tiempo. La mayoría tienen una política de "ropa opcional", lo que significa: “usted puede o no desnudarse”
La implicancia es que si a usted le es más cómodo estar solo parcialmente desnudo, la política de ropa opcional lo permite…Se dice que esto es amigable con los recién llegados que aún no están listos para desnudarse del todo.
Tras reflexionarlo recientemente, he decidido que no creo que "ropa opcional" sea una buena idea…En términos simples: Si no está desnudo, usted no es un participante; sino que es un espectador.
¿Qué hay de malo en ser un "espectador" y no un "participante"? Bastante simple…Cualquier tipo de organización - un club nudista, un partido político, una iglesia, un equipo de bolos, etc.- existe porque personas de ideas afines deciden asociarse con los demás y hacer algo en común. Si usted apenas está presente, y mirando, no contribuye. Y no es realmente no es para nada parte de la organización.”
El naturismo necesita más participantes, no más espectadores, si queremos crecer y florecer. Permitir a la gente ser espectadora, con la ropa puesta, en vez de participar desnudos, no nos ayuda a crecer
No obstante ambas posturas no son tan opuestas, en realidad la diferencia se encuentra en la forma de encarar la problemática. En el primer caso se “trabaja” armoniosamente sobre la persona, tratando de ayudarla a superar sus dudas y limitaciones culturales, dándole el tiempo necesario para madurar su desnudez y en última instancia si no lo logra solo se autoexcluye. En la segunda el slogan es “desnúdese o váyase!”
Sin embargo nosotros proponemos una solución definitivamente integradora: Porque la gente desnuda no puede aprender a convivir pacíficamente con los vestidos, de la misma manera que pueden convivir los trajes de baño enteros con las biquinis y las políticas de derecha con las de izquierda?
Pero esto sucede en la medida que impere la tolerancia en las preferencias, que es precisamente la conducta que pregona el naturismo. No hay nada malo en desnudarse ni nada malo en vestirse. Es una manera de estar, pero lo que es básicamente exigible es el respeto a la ética naturista. “Si le gusta quédese vestido…pero se sentirá mas cómodo entre nudistas si se desnuda” o una sutil sugerencia “Nosotros vivimos desnudos …Y Ud..? como expresa un cartel de un camping nudista francés
Si el nudista está realmente cómodo con su propia desnudez y tiene internalizado que no hay nada de vergonzoso en ello, no tiene porque sentirse incómodo y no considerar que la gente que no se desnuda va con la única intención de mirar
Proponemos esta reflexión tanto a nudistas como textiles. “Somos todos humanos y todos estamos desnudos bajo la ropa”
Fuentes :
http://www.jornalolhonu.com/jornais/olhonu_n_139/entrevista.html
http://nuderenewed.com/page/3/ 5/10/2011
fotos: http://miguelwatio.blogspot.com.ar/
compaginación: Florencia Brenner
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