Federaciones Naturistas y nuevas estrategias
Pensamos que es hora de evolucionar, de investigar las necesidades de los
naturistas modernos y cambiar sus estrategias en consecuencia. Es hora de
promocionarse, mostrar a las personas quiénes son y que hacen, si quieren
ganar nuevos miembros.
En varias de nuestras publicaciones anteriores hemos culpado a las
federaciones naturistas por afirmar que sólo puede haber un tipo de
naturista: el tipo que es miembro de un club, paga la tarifa, lee la revista
trimestral… Los tiempos han cambiado y también las maneras en que a la gente
le gusta disfrutar de su tiempo libre.
 A algunos ya no les importa demasiado el aspecto social, no quieren pasar
todos los domingos por la tarde en un club, en el mismo club. Muchos están
dispuestos a pagar por el uso de las instalaciones en lugar de tener que
hacer las tareas domésticas. Y la mayoría de los naturistas "modernos" no
quieren estar atrapados en un club, un país o una federación. Quieren
explorar todas las posibilidades. Por eso creemos que las federaciones
naturistas deberían cambiar sus estrategias.
Somos mochileros, “… con ropa destrozada, sin rasurar, comiendo basura,
mochileros malolientes “… O al menos eso es lo que solía ser la opinión
general sobre nuestro tipo de viajeros. Y dormimos en albergues juveniles.
El principio de los albergues juveniles comenzó en Alemania (al igual que el
naturismo, por cierto), eran lugares donde los estudiantes podían dormir a
un precio ridículamente barato o incluso gratis a cambio de hacer algunas
tareas. Pronto apareció una organización, Hosteling International, que se
ocupaba de los derechos de los viajeros, se aseguraba de que todos los
albergues tuvieran las instalaciones necesarias y los conjuntos de reglas, y
solicitaba una cuota anual para ser admitido en cualquiera de los albergues
afiliados.
Alrededor de los años ochenta más y más personas se involucraron en viajes
independientes con diferentes requisitos, diferentes necesidades y a menudo
dispuestas a pagar un poco más por su alojamiento para no tener que limpiar
la cocina o el baño antes de irse. Algunos incluso prefirieron la comodidad
de una habitación privada en lugar de dormir en un dormitorio con colectivo.
Pero Hosteling International fue estricto. Un albergue sólo tiene
dormitorios, hombres y mujeres deben separarse y los viajeros deben hacer
las tareas y pagar la membresía. No pasó mucho tiempo antes de que alguien
notara el agujero en el mercado y comenzara un albergue con sus propias
reglas, donde las parejas podían estar en la misma habitación y donde se le
permitía regresar después de las 10 p.m. Sí bien el alojamiento era más
caro, la gente estaba dispuesta a pagar por su comodidad. Hostel
InternacionaI podría haberse anticipado desde el principio, pero se adhirió
a sus propios principios. En este momento ha evolucionado, pero es demasiado
tarde y, por lo tanto, menos del cinco por ciento de todos los albergues
todavía están afiliados a ellos.
 ¿Por qué te estamos diciendo todo esto? Porque es difícil no ver una
evolución similar entre las instalaciones naturistas. Hemos estado en varios
lugares naturistas que no están afiliados con el INF ni con ninguna
federación nacional naturista, no quieren aplicar reglas a sus visitantes
que no son suyos y sienten que los beneficios que obtienen al no estar
afiliados son más grandes que los que obtendrían si fueran miembros.
Generalmente, estos son lugares que atraen a un público más joven.
¿Por qué creemos que las federaciones naturistas deberían cambiar su
estrategia? ¿Por qué deberíamos preocuparnos por esto?
Sería fácil culpar de todo a las federaciones y decir que están perdiendo
miembros por culpa suya porque siguen apegándose a sus antiguos principios e
ideas. Si no quieren evolucionar, terminarán en una esquina de la sociedad
naturista.
Sin embargo, las organizaciones naturistas no sólo se aseguran de que el
naturista se sienta cómodo dentro del club, sino que también luchan por más
playas, cambios en las leyes y la protección de los derechos naturistas
tanto nacionales como internacionales. Sin ellos, nuestras opciones serían
muchas menos. No queremos arrojar piedras a las federaciones naturistas
porque sabemos que algunas de ellos están haciendo lo mejor que pueden,
aunque a menudo dependen mucho de los voluntarios. Y tampoco culpamos a los
naturistas que no quieran invertir en una organización si no creen en ella.
Sólo queremos decirles a las federaciones naturistas que es hora de
evolucionar, más que nunca. Es hora de investigar las necesidades de los
naturistas modernos y cambiar sus estrategias en consecuencia. Es hora de
promocionarse, mostrar a las personas quienes son y que hacen, si quieren
ganar nuevos miembros ¡Nos necesitamos!
Fuente:
http://www.nakedwanderings.com/2017/11/16/think-naturist-federations-change-strategies/
Traducción y síntesis de Revista Nudelot
|
